Veja artigo publicado no blog Educomunicación sobre uma experiência que uniu crianças e rádio para trabalhar a cultura local no deserto do Atacama/Chile.
1.-El Punto de partida.
El proyecto se desarrolla en una localidad de seis mil habitantes llamada Freirina. Se ubica en pleno desierto de Atacama. Y su vida nace por estar en medio de un valle que quiebra el desierto provocando el verde y desde los costados las fecundas vetas de cobre y oro. Las cuales en épocas pasadas dieron gloria y reconocimiento a la zona.
Su carácter productivo es campesino y de minero, pero a pequeña escala . De allí que se han construido una serie de leyendas alusivas a
2.- El Proyecto
Durante el año 2007 el Director de
Este Proyecto consistió en la elaboración de 30 Microprogramas radiales, uno por cada leyenda. La novedad radica en que los niños son los transmisores y locutores de estas historias.
El objetivo de esta iniciativa es empoderar a los niños en el uso de la radio como una plataforma educativa de las propias comunidades; con el valor agregado de que sus pares asumieron potentemente las leyendas y los adultos se acercaron emotivamente más por la calidez y dulzura de la voz de un niño.
Por otra parte, los niños ejecutores se enriquecieron por las competencias adquiridas en la comunicación radial. Especialmente en la construcción de imágenes radiales.
A veces la
El ejercicio del “poder” usar los MCS es impulsador del proceso educativo de los niños tanto por lo que se experimenta en el acto como los efectos recompensatorios posteriores.
Asimismo los adultos también despertaron el amor hacia su riqueza cultural. Fueron justamente los niños como relatores de esta historia[2] quienes sacudieron “la emocionalidad” dormida ó hipnotizada respecto de la riqueza literaria ancestral que poseían.
Los audios de los 30 microespacios fueron soportados en el sitio www.mascultura.cl y a su vez se envasaron en un CD para ser entregados como material pedagógico en las bibliotecas escolares de la región.
De esta manera, el impacto de este proyecto se extiende en el tiempo. Al poder ser un material didáctico. Así también los niños se convierten en modelos de educomunicadores de sus pares. Demostrando que todos podemos ser educomunicadores; pero debemos capacitarnos para ello y darle la intencionalidad educativa a cada proceso comunicacional que elaboremos ó utilicemos.
a) El empoderamiento del estudiante. Durante siglos crecimos en una educación de carácter vertical. EL profesor habla, el alumno escucha. El profesor es la fuente de conocimiento, el alumno el receptor del conocimiento. El profesor domina, el niño es dominado. Eso cambio absolutamente con el ingreso de las TICs en la vida de las personas. Y esto se pudo verificar en la obtención de la información del material base para los guiones de los microespacios radiales. Se utilizó información de Internet y videos con ancianos relatando las leyendas, incluso algunos habían muerto. Pero quedo el registro.
Y a eso le debemos sumar que los niños aparecen como los trasmisores de las leyendas. Con lo cual pasan a ser ellos los protagonistas en la educación de los pares. Y por otra parte, los alumnos que escuchen este material didáctico pasan a tener un mayor liderazgo porque ellos mismos pueden re-elaborar lo escuchado. Comienza una horizontalización del proceso educativo; ahora el profesor no detenta solo el poder del conocimiento sino también sus alumnos. Los cuales lo reciben ó buscan dichos saberes a través de las múltiples posibilidades que nos dan las TICs.[1]
b) La multicreatividad, lo sensorial: una nueva semiótica. El modelo clásico de educación supone una débil capacidad de innovación. De hecho se bromeaba –hasta hace poco- que si un nombre viajara del pasado hasta la actualidad, encontraría todo igual menos la sale de Clases,
c) Nuevos formatos de envasado del conocimiento. Desde los sumerios, una parte de los saberes y el conocimiento -en general- fueron envasados y transmitidos por la vía escrita. Y la gran mayoría fue por transmisión oral. Tras el invento de la imprenta, por Gutenberg, a finales del Medioevo vino el impacto del libro. El amo y señor en la transmisión del conocimiento. Pasaron más de cuatro siglos para que aparezcan nuevos formatos de envasado y transmisión del saber. Ya el esquema de la educación estará monopolizado por el libro. Hasta él mismo aparece como digital. Tenemos formatos audiovisuales, digitales, virtuales y sonoros. Justamente este último fue el utilizado en el Proyecto “Los Niños también cuentan”. El respaldo en audio recrea de una manera original. Mantiene la capacidad de abstracción (debemos elucubrar el cómo es la imagen que nos evoca el sonido). En este sentido por el contenido mismo del proyecto: las leyendas requiere que se desarrolle lo connotativo del relato. El envasado audiovisual tiene ese peligro dado que la imagen ya viene resuelta. Por otra parte, los nuevos envasados relativizan el concepto de aquí y ahora. Porque pueden reproducir los contenidos del envasado en cualquier momento y de manera uniforme, sin alterar el relato. De esta manera, el CD con los audios se han constituido en una nueva herramienta educativa porque apoyan desde su originalidad, la percepción sonora que da calidez e introduce en el vuelo de la imaginación.
d) Multi-estimulación, la era del “educere”. A propósito de los nuevos formatos de envasados del conocimiento. Esto nos transporta a al cualidad de cada formato. En el apartado anterior se hizo una valoración de la cualidad del audio. Pero cada canal comunicativo tiene su valor. Así los formatos audiovisuales y digitales tienen sus capacidades propias como el 3D. Esto ha inducido a un proceso de que la educación no puede aplanarse en un formato. Requiere la variedad. El niño de hoy está fuertemente multiestimulado. Por muchas vías está recibiendo información y conocimiento. Ningún formato puede derribar a otro. La integralidad del conocimiento se asume desde diversos ángulos. Y justamente por ello el educador debe estar dispuesto a utilizar la variada gamas de formatos. El estudiante actual vive inmerso en un mundo de la multi-estimulación; ya no se puede educar con pizarra y tiza. El educador -consciente de ello- está llamado a desarollar y utilizar los nuevos formatos. Para concordar con Sócrates debemos ayudar que los sentidos ayuden a parir y reconocer la realidad. Ya no es la era del “educare”, es la hora del “educere”.
e) Oportunidad de un mayor atractivo para Educar. Al ver la película El Club de los Poetas Muertos: [1]. Nos recuerda la dimensión violeta del esquema educativo clásico. Aprender pasa a ser sacrificio, un dolor, una cruz. Nada más lejos de la identidad de la educación, lejos de la vivencia de Platón con su Academia y de Sócrates con el Liceo. Se ha impuesto por siglos un esquema donde integrarse a un proceso educativo no es grato. Ingrato para el alumno que debe enfrentarse a monólogos académicos e ingrato para los mismos alumnos, que pudiendo tener claro el valor de ésta, la asumen como un trago amargo. La virulencia escolar que se vive en muchos países[2] no refleja nada más que el descontento y la violencia implícita de un sistema escolar clásico que no se atreve a innovar y trata a sus “beneficiarios” como niños medievales. Este punto ofrece una noble oportunidad a los educadores para transformar el concepto estático de educación a uno más dinámico y centrado en la persona humana. Ya no más estudiantes receptores sino interlocutores. Los cuales están llamados a aportar y reciclar el conocimiento con él que ya traen desde afuera de
f) De Bibliotecas a Mediatecas. Tal como indica PEREZ TORNERO en su papers “Crisis de comunicación, crisis de educación” las Bibliotecas están transformándose. Ya el libro no es el amo y señor. Aparecen nuevos formatos. Y están desafiadas a recoger ese material. En el proyecto los programas radiales fueron entregados a diversas bibliotecas escolares de la zona. Los cuales están disponibles como material didáctico para los estudiantes. Y entonces cabe preguntarse ¿por qué los educadores no comienzan a envasar los materiales cualitativos que han preparado en sus clases, incluso con sus alumnos? La respuesta no es fácil, pero con certeza si los grandes educadores de nuestra historia hubiesen tenido las herramientas y el acceso masivo a ellas no hubiese dudado un momento en utilizarlas. Tal vez estén pero falta proyectar el material en nuestras Bibliotecas impelidas a poner su mirada más allá de los libros.
4.- Criterios de evaluación y reconocimiento
Los primeros cuatro criterios se colocan en duplas, entendidos como polos que están en permanente tensión pero que son interdependientes. Estos criterios se aplican a todos los actores del proceso comunicativo.
Síntesis – segmentación. Cada vez los Medios abordan de manera más especifica una temática. Hay una mayor segmentación de los contenidos. Lo cual comporta una mejor accesibilidad al usuario, al estudiante. Pero comporta un riesgo porque hace más fragmentada la comprensión de la realidad. Y esto no completa el proceso educativo. Por lo cual el otro polo que equilibra esto es el desarrollo de la capacidad de síntesis por parte de los estudiantes. Deben aprender a vincular los contenidos fragmentados. Y en esa perspectiva los módulos educativos deben desarrollar esta competencia entre los alumnos y para ello se requiere que los mismos formadores tengan esa capacidad para ayudar a desarrollar las destrezas colaterales (vgr. La ubicación de los verbos generadores de ideas).
Glocalización- globalización. EL proceso de
Orientación- navegación. Cada día impajaritablemente hay una mayor cantidad de contenidos. Los estudiantes pueden acceder a un verdadero “tsunami” de información a través de las NTICs. Los educadores no pueden ignorar esto en su actividad docente. El alumno puede –por ejemplo-encontrar un trabajo listo 100 % sobre una tarea que se le solicite. Hasta existen sitios web dedicados a ofrecer una base de tareas escolares[4]. Entonces, ¿el profesor no da tareas? ¿prohibe el uso de Internet? La competencia a evaluar debe ser otra es la capacidad de orientación discriminadora. Todos los actores educativos deben aprender a poner su eje en el desarrollo de las competencias que refuerzen la capacidad de orientarse en la búsqueda de los contenidos, con una mirada discriminadora sobre criterios determinados. Y eso es justamente la tarea del educador formular de una manera distinta las preguntas y las lógicas evaluadoras.
Humanización-tecnologización. Caminamos a una mayor presencia dominante de la tecnología. No hay espacio de la vida humana que no esté marcado por esto. Este proceso ha mejorado la labor del hombre y en particular la comunicación y la educación. Sin embargo esto es ambivalente porque trae males como el enfriamiento de las relaciones humanas. Vgr. Hoy la vida de hogar es un padre mirando fútbol en el cable, una madre que se entretiene con su telenovela favorita y un hijo que chatea por Internet. Y la escuela corre el mismo riesgo, el educador puede delegar todo en las máquinas; sin negar el esfuerzo que supone la elaboración de una herramienta didáctica digital. Pero se pierde –en no pocas veces- el proceso personalizador. Y que en último término hace que
Capacidad de multidisciplinariedad y multi-inteligencia. El mundo hace tiempo que dejó de ser conducido por una “mente iluminada”. Ya no es época de una sola mirada. La realidad es altamente compleja, con múltiples factores interdependientes. No por algo cada vez hay personas que tienen dos ó más profesiones. Los saberes son interdependientes, se requieren mutuamente. Y esto debe ser asumido y evaluado en los procesos educativos actuales. Por una el proceso debe tener en sus contenidos estos rasgos y también en la evaluación. Y al respecto se debe hacer patente que no es sólo una inteligencia la que educamos. Están las otras inteligencias. Que por cierto las ciencias educativas conllevan una histórica deuda sobre la formación de la inteligencia emocional[5], por nombrar una.
Nuevas formas de reconocimiento, Nuevos enfoques curricular. Todo lo mencionado en este informe no contiene grandes novedades. Sin embargo, el meollo está aumentar el re-conocimiento de estos criterios. Se han mencionado varios actores alumnos, profesores y familia involucrados en este re-conocimiento, volver a mirar el proceso educativo. De esta manera estas reflexiones quedan inconclusas si
[1] Aborda la historia de un Colegio-Internado de Inglaterra con mucho rigor académico; fiel a la consigna “por la sangre entra las letras”. Y aparece un profesor que no sigue ese esquema, es cercano, y es ridiculizado por los alumnos..
[2] Al menos en los países de Latinoamérica y USA
[3] Nuevas tecnologías de
[4] Vgr. www.rincondelvago.cl
[1] Esto corrobora que las Bibliotecas deben dejar esta nomenclatura para ser Mediotecas.
Nenhum comentário:
Postar um comentário